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Autor: Felipe Vergara

abril 4, 2023 / Actualidad empresarial

La alineación empresarial es esencial para el éxito y la sostenibilidad de una organización en el competitivo y cambiante entorno empresarial actual. La alineación implica que todos los aspectos de la empresa, incluyendo la estrategia, los recursos, la capacidad organizacional y los sistemas de gestión, trabajen en conjunto para lograr los objetivos y la misión de la empresa. Sin embargo, muchas organizaciones enfrentan desafíos en la implementación y el mantenimiento de una alineación efectiva.

En Trino Consultores, hemos medido el desalineamiento de las empresas en Chile en más de 30 proyectos, detectando que esto representa aproximadamente un 25% del tiempo de los colaboradores. Este dato es preocupante y resalta la importancia de abordar el desalineamiento para mejorar la eficiencia y la productividad en las organizaciones.

Uno de los principales factores que contribuyen al desalineamiento es la falta de comprensión y conciencia sobre la importancia de la alineación por parte del equipo directivo. Muchas veces, los directivos se enfocan en aspectos individuales de la empresa, en lugar de considerar el conjunto y todas las partes por igual. Esto impide que la organización alcance su máximo potencial y limita su capacidad para adaptarse y competir en el mercado.

Otro factor que contribuye al desalineamiento es la falta de una persona que se responsabilice de alinear la empresa. En muchos casos, los directivos se centran en proteger y optimizar sus propios recursos y departamentos, en detrimento del bien común de la organización. Es crucial contar con una persona capacitada y con autoridad para asegurar que la empresa esté estratégica y estructuralmente alineada.

La complejidad organizacional también dificulta la alineación de la empresa. Cuanto más grande y diversa sea la organización en términos de empleados, líneas de negocio y ubicaciones geográficas, más difícil será lograr una alineación efectiva. La simplicidad y el enfoque son esenciales para facilitar la alineación y garantizar la coherencia en toda la empresa.

Además, la actividad frenética y la falta de reflexión y discusión sobre los objetivos y la dirección de la empresa también contribuyen al desalineamiento. Las organizaciones que priorizan la acción rápida y los resultados a corto plazo, en lugar de dedicar tiempo y esfuerzo a la reflexión y la planificación, corren el riesgo de desviarse de su propósito y perder su enfoque central.

Para abordar estos desafíos y mejorar la alineación en la empresa, es fundamental que los líderes y directivos sean conscientes de su importancia y trabajen juntos para definir claramente el propósito y enfoque central de la organización. Una vez que se haya establecido un propósito y enfoque claro, la estrategia de la empresa debe diseñarse para apoyar y cumplir con estos objetivos. La estrategia debe ser flexible y adaptarse a los cambios en el entorno empresarial, mientras que el enfoque central debe permanecer constante.

Los recursos y capacidades de la empresa también deben estar alineados con la estrategia y el enfoque central. Esto incluye garantizar que las personas, estructuras, procesos y cultura de la empresa sean adecuados y estén alineado